El pelotón

Llegaron a la casa donde según informaciones confidenciales, se habían cobijado algunos rebeldes y siguiendo el protocolo habitual, enviaron al más recluta del grupo como avanzadilla para que inspeccionara el lugar, como en el ejército no se discuten las ordenes, entró en aquella extraña casa mientras los demás esperaban afuera, de pronto se escucharon los gritos del  joven, seguidos de disparos y sin perder un segundo, el resto del pelotón cargó las armas y entraron apresuradamente en la casa, allí no había luz, solo disponían de una linterna y de sus armas, una vez dentro, hallaron al soldado tumbado boca abajo en el suelo, inerte, le tomaron el pulso y comprobaron que estaba muerto, entonces escucharon algo en el otro extremo de la casa y se dirigieron todos hacia allí, pero para sorpresa de todos, no encontraron nada, de pronto, quien iba en retaguardia notó algo detrás suyo, se giró y con los ojos desorbitados, vió al recluta delante suyo flotando, con los ojos en blanco y una sonrisa burlona en sus labios, de modo que empezó a dispararle, los demás le secundaron y pronto se pusieron todos a disparar hasta que vaciaron sus cargadores, y viendo que las balas no le hacían efecto, corrieron en desbandada por toda la casa agolpandose contra las ventanas, una vez fuera siguieron corriendo colina abajo sin mirar atrás, en su huida arrojaron armas y pertrechos, para que estos objetos no estorbaran su huida, cuando llegaron al cuartel, contaron todo lo ocurrido y tras días de interrogatorios fueron sometidos a un consejo de guerra del que fueron absueltos por circunstancias mayores: varios testigos del lugar aseguraban haber visto a seres que parecían humanos pero que levitaban en el aire, se transformaban en animales y extraían la sangre al ganado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario