Un hombre recorria una
carretera solitaria de noche, tras horas de monótona conducción, vislumbró que
había algo tendido en la carretera y cuando estaba cerca, vió que se trataba de
una pareja tendida en el suelo. La chica no se movía pero el chico gesticulaba
pidiendo ayuda. El hombre cogió a la chica entr sus brazos y ayudó al chico a subir,
condujo tan rapido como pudo hasta recalar en un hospital. Cuando llegó,
explicó todo lo que había ocurrido mientras sacaban a la desdichada pareja de
su coche. El hombre tuvo que esperar un buen rato hasta que apareció el doctor
a cargo de los pacientes.
-Doctor, ¿Cómo están,
salvarán la vida?
-Relájese... Vamos a ver, según lo que explicó a su llegada, encontró a dos jóvenes en la carretera ¿Es eso cierto?
-Sí, la chica no estaba inconsciente pero el chico me contó lo que ocurrió y me pidió que me diera prisa.
-Es que...todo lo que me cuenta es muy extraño: le pediría que hiciese un recordatorio exhaustivo de los hechos y que mire a su alrededor: los jóvenes de los que habla son quienes encontraron su coche volcado a un lado de la carretera; se quedó dormido mientras conducía y son ellos quienes le han traido hasta aquí.
-Relájese... Vamos a ver, según lo que explicó a su llegada, encontró a dos jóvenes en la carretera ¿Es eso cierto?
-Sí, la chica no estaba inconsciente pero el chico me contó lo que ocurrió y me pidió que me diera prisa.
-Es que...todo lo que me cuenta es muy extraño: le pediría que hiciese un recordatorio exhaustivo de los hechos y que mire a su alrededor: los jóvenes de los que habla son quienes encontraron su coche volcado a un lado de la carretera; se quedó dormido mientras conducía y son ellos quienes le han traido hasta aquí.
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